Martha Parker

(Historia sólo rol y fanfic >) Mycroft Holmes y Martha Parker entablaron una relación amorosa muy intensa cuando ella tenía dieciseis años. Un día, mientras Mycroft estaba en una cafetería con unos compañeros de la universidad, vio pasar a una esbelta chica de pelo rizado castaño oscuro y se quedó prendado. La siguió y descubrió que iba a baile, así que cuando tuvo la oportunidad, fue a verla a uno de sus espectáculos y la esperó a la salida para presentarse. Estaban realmente enamorados, y a pesar de ser joven, ella estaba muy implicada. Mycroft también, y aunque era cuatro años mayor (casi veinte años), la quería mucho, e incluso quería casarse con ella, pero la familia Holmes no aprobaba la relación, y mucho menos aprobaría un matrimonio. Concretando, era la madre de Mycroft la que no quería saber nada de esa chica. No quería que le arrebatase a su hijo. A Mycroft le dio igual y siguió con Martha a pesar de la negativa de Elaine.

Cuando cumplieron un año, Mycroft llevó a su hermano a conocer a Martha (Sherlock tendría unos trece años. Fue a esta edad cuando leyó el caso del pequeño Carl Powers en el periódico, su inicio. Sólo él vio algo raro en el caso e intentó llamarle la atención a la policía, pero a nadie pareció interesarle). Esa noche bailaría en El Cascanueces, de Tchaikovsky. Sherlock fue a regañadientes porque creía que su hermano le estaba gastando algún tipo de broma. No entendía por qué últimamente estaba tan simpático con él, pero cuando vio a Martha lo comprendió. A Sherlock le cayó muy bien. La veía una chica inocente pero madura, muy guapa, una gran bailarina y con una sonrisa muy sincera. Pocas veces había visto Sherlock ese rasgo en una mujer, ya que su madre apenas le sonreía. Sólo su tía Elisabeth le dedicaba una cálida sonrisa cuando le visitaba. Sherlock, que se había cerrado ante extraños tras la muerte de su padre y se mostraba antisocial, volvió a abrirse con Martha. Gracias a ella se interesó por la música en general, pero sobre todo por los ballets de Tchaikovsky, convirtiéndose en un amor que hoy en día perdura.

Cuando llevaban un año y unos pocos meses, antes de que Martha cumpliera los dieciocho, Mycroft tenía pensado pedirle matrimonio. Martha lo sabía, y la madre de Mycroft también, y no iba a permitirlo. Martha llevaba semanas con mareos y malestar físico, aunque se lo ocultó a Mycroft. Fue sola al médico, y este le dijo que estaba embarazada. Elaine se dio cuenta en una visita de Martha de que no tenía muy buena cara. Era su mejor oportunidad para romper su relación y librarse de ella. Consiguió alejarla de Mycroft llevándosela a otra sala, y le dijo que sabía que estaba embarazada. Le aseguró que si seguía adelante con su hijo y le decía que sí a su propuesta de matrimonio, ella haría lo que fuera posible para separarlos y para quitarle el bebé. Martha no tuvo más remedio, muy a su pesar, de decirle que no a Mycroft. Un no fue lo único que dijo. La vida que crecía en ella no podía irse, no podría ver cómo se la arrebataban, pero sufrió en su corazón el tener que dejar a Mycroft.

A partir de entonces intentó alejarse de él y de su familia para mantenerse a salvo tanto ella como él, porque sabía que Mycroft la quería mucho y de haber seguido con la relación y posteriormente con un matrimonio, la separación provocada por su madre le mataría. Era mejor así. Nadie más en la familia Holmes supo lo del embarazo ni la razón de por qué Martha no quiso casarse con Mycroft. La única persona que sospechó algo fue Elisabeth, que se encariñó rápidamente con ella, pero al no tener pruebas relevantes, no pudo decir nada. Sherlock no volvió a ver a Martha, pero nunca se olvidó de ella. Después de esto, el hermano mayor de los Holmes se convirtió en el Hombre de Hielo.

(Kat Dennings, nuestro headcanon de Martha Parker)